Héroes durante el huracán Dorian en Bahamas
Por Raúl Enrique Bibiano
En principio, Glen Rolle tomó la iniciativa de rescatar a su propia hija de 13 años que según su relato al The Nassau Guardian, lo había llamado por teléfono pidiendo ayuda por la severidad de la situación en su área de residencia, pero al llegar en horas del domingo por la noche, fue imposible acercarse a la vivienda donde se encontraba la pequeña, por causas del viento huracanado y la altura del agua que casi los arrastra en medio de la oscuridad reinante.
La
tarea no ha sido para nada fácil, en primer lugar, por la carencia
de medios apropiados y en segundo lugar por la situación reinante
que hacía imposible cualquier intento de socorrer a nadie. En
aquella noche de domingo 1° de Septiembre, tuvieron que permanecer
dentro del rodado hasta las 7 de la mañana del lunes 2 para poder
visualizar con la luz del día el panorama y determinar los pasos a
seguir para el rescate de su pequeña hija.
Cuando
comenzaron a observar, aun sin poder hacer otra cosa que observar el
panorama, pudieron ver a personas sobre los techos de sus viviendas
inundadas agitándoles los brazos pidiendo ayuda con desesperación,
situación caótica y desesperante porque no tenían forma de llegar
hasta ellos para ayudarlos en un primer momento y durante todas las
horas que le siguieron de ese lunes.
Glen
Rolle relata que debieron aguardar hasta el martes 3 para intentar
rescatar a su niña y a el hermano de uno de sus amigos que junto a
la esposa y un bebé, estaban también en condiciones de alto riesgo,
por lo que se vieron obligados a regresarse a Freeport.
Finalmente,
ese martes, observando que no podían llegar en automóvil porque
todo estaba inundado, valiéndose de vehículo apropiado y de motos
acuáticas y botes prestados, comenzaron a llevar adelante dichos
rescates. Pero no fueron los únicos… Terminaron rescatando a unas
200 personas en una demostración de heroísmo sin precedentes. Ellos
jamás habían oficiado de rescatistas ni eso se encontraba en sus
pensamientos hasta ese mismo instante en que se transformaron en una
suerte de ángeles de la guarda porque ni siquiera autoridades
prestaban auxilio a las personas atrapadas por el huracán allí en
Lady Lake y Casuarina Bridge.
Según
Glen Rolle, “rescataron a un hombre que llevaba unas 24 horas
aferrado a un árbol en su parte superior. El hombre estaba sin piel
en todo su cuerpo debido a los golpes recibidos del aguacero y del
viento contra las ramas y que la esposa del sujeto había caído a
las aguas ,antes de ellos socorrerlo, pero no hubo señales de ella
y solo pudieron rescatarlo al sujeto.”
Otra
persona de las decenas que rescataron, era una mujer que traía
consigo un refrigerador y entonces, narra Glen Rolle, le dijeron,
“mujer, no tienes que traer el refrigerador en esta situación y
que entonces la mujer abrió el aparato y dentro se encontraba su
bebé que sobrevivió milagrosamente”
Siguiendo
su relato, Glen Rolle manifestó que “Comenzamos a peinar el área.
Teníamos un [compañero] allí llamado Jason Albury. Estuvo conmigo
los dos días. Estuvo allí durante toda la labor.” Jason
coordinaba los rescates y anotaba los nombres de cada persona
rescatada para trazar un registro de las personas sobrevivientes como
si fuera un experto, aunque no lo fue hasta ese mismo momento en que
les tocó vivir esta terrible experiencia.
Pero
hay algo que relata Glen Rolle, que realmente, demuestra la razón
por la cual el gobierno aun no da a conocer cuantas fueron las
víctimas fatales… Que seguramente superan ampliamente las 5 Mil.
Su relato, nos tiene que ayudar a comprender los verdaderos motivos
que el gobierno de Bahamas oculta por alguna razón al mundo. Ellos
contribuyeron de forma directa o indirecta a que muchos cadáveres
desaparezcan.
«
Rolle dijo que comenzaron a ver cuerpos flotando y comenzaron a
traerlos, pero pronto se les ordenó detenerse. Estuvo a punto de
llorar al contar la experiencia.»
“Uno
de mis amigos personales, su madre falleció. Entonces la trajimos ”,
dijo.
"...
Después de eso, la policía finalmente llegó a la escena. Entonces
nos dijeron que no trajéramos más cadáveres.
“Le
dije: 'Vamos, hombre. ¿Qué intentas decirme? ¿Déjalos?'
“Así
que volví a salir y en mi camino de regreso, dos cuerpos pasaron
junto a mí. Eso hizo que mi corazón se turbe tanto al saber que no
se me permitió traerlos de vuelta.
“Sus
familias probablemente nunca los verán por la forma en que la marea
los estaba llevando al mar. Es posible que nunca se cierren para
saber que su familia realmente se ha ido.”
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