Por Raúl Enrique Bibiano
Algunos ya murieron y otros están en la cárcel, pero aun faltan muchos más, a los que la justicia los tiene en su afinado proceso por los hechos de "Corrupción K"
La creciente ola de “arrepentidos” de los
últimos días en Argentina, con relación a los hechos de corrupción de los
facciosos Kirchneristas & Asociados, ya parece transformarse en un Tsunami,
del cual forman parte; no solo empresarios coimeros, más también, recaudadores
del entonces “gobierno peronista”, del que fueron funcionarios.
Lo cierto es que durante muchos años, el
gobierno en Argentina, se había transformado en una mina de recursos dinerarios.
No precisamente para favorecer al país y a sus ciudadanos, los recursos eran
para favorecer a quienes ostentaron el poder y que todavía se resisten, generando caos y rebeliones populares,
aprovechando como siempre, a elementos de los grupos más vulnerables, que para
ellos, siempre ha sido mucho más fácil manipular.
Pero, no solamente, podemos hablar sobre actos
de enriquecimiento ilícito, cometidos por estos personajes nefastos de la
política argentina, también tenemos que pensar en cuantos crímenes han cometido
que todavía no se han dilucidado, o aun no salieron a la luz para ser
investigados con éxito por parte de la justicia.
La falta de respeto a la sociedad ha sido tan
grande, que inclusive hasta se firmaban decretos por parte de la ex presidenta,
para favorecer algunos contratos o concesiones,
excluyendo a beneficiarios de tener que licitar para obtener la extensión de su
contrato con el estado. Ello conforme a la confesión en sede judicial de un
importante empresario que testificó bajo la figura de “arrepentido”, haciendo
constar en su declaración, haber pagado U$D 600 Mil para ser favorecido por un
decreto presidencial para mantener su contrato desde 2010 hasta 2021. Decreto
que fuera firmado por la entonces Cristina Elizabet Fernández, y publicado en
el Boletín Oficial.
Otros arrepentidos que participaron de la
función pública partidistas del peronismo, también dieron a conocer que la ex
presidenta no estaba ajena a nada de lo que sucedía con relación a las “coimas
millonarias”, dado que la ubicaron a ella en tiempo y espacio, en la recepción
de los bolsos repletos de millones de dólares entregados en su propio
domicilio.
Ahora se espera que todos vayan presos para
pagar sus delitos hasta el momento conocidos ya por todos y en manos de la
justicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario