NO ALCANZAN LAS LEYES ACTUALES SOBRE LA TEMÁTICA DE GÉNERO Y TAMPOCO LOS BOTONES ANTIPÁNICO, CUANDO YA SE HA VISUALIZADO, NO SIRVEN DE NADA ANTE ATAQUES FURTIVOS.
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| Gisela López 19 años de edad, víctima de Femicidio en Santa Elena, Entre Ríos |
Es tiempo ya, que el
Poder Legislativo Nacional, se vista los pantalones largos y se dejen
de balbucear como niños de pecho, enmarañando los rumbos que
necesitamos para avanzar los argentinos en aras del bienestar general.
No caben dudas que es más
que necesario, que los señores y señoras del Legislativo, realicen
labores parlamentarias que nos ayuden a mejorar la calidad de vida,
de salud, de educación y por sobre todo, de seguridad y justicia.
En menos de un mes, hemos
obtenido casi media docena de nuevas víctimas de Femicidios en el
País, y ello requiere un freno de mano con mucha celeridad. No
alcanza con haber elaborado una ley que haga punible el delito de
genero como el Femicidio, es necesario aumentar las penas y buscar
las fórmulas que contribuyan a evitar que esta situación aberrante,
continúe creciendo de tal manera, que pronto se transformará en una
pandemia.
En los últimos días del
mes de abril, en la localidad bonaerense de El Palomar, era
encontrada sin vida una operaria de una fabrica: Marisa Sotelo de 25
años de edad. En Córdoba la desaparición y hallazgo sin vida de la
fisioterapeuta Carina Alejandra Drigani Bulla de 44 años de
edad, a quien siguieron lamentablemente en la misma desgracia, la
adolescente Florencia Ayelén Mariez Currena de 14 años de edad y
María Soledad Ramos de 26 años de edad. Ahora también se ha sumado
el caso de la joven Gisela López de 19 años de edad que se
encontraba desaparecida en la localidad de Santa Elena de la
Provincia de Entre Ríos desde el pasado 22 de abril.
La realidad, nos demuestra la intrincada cuesta abajo por la que vamos rodando de manera precipitada día tras día, en relación a los casos de violencia de Género. Es obligación de los tres poderes del gobierno, poner fin a esta terrible situación en la que no parecen existir limitaciones para los cada día más violentos femicidas.
